La zona de confluencia de los corredores de los páramos Tota-Bijagual-
Mamapacha y Pisba en el Departamento de Boyacá, se encuentra en riesgo por actividades de alto impacto y los efectos del cambio climático, que han generado la pérdida de coberturas vegetales y la disminución de la oferta hídrica. En el año 2019, el PPD en alianza con la Corporación Mundial de la Mujer Colombia (CMMC) y la Fundación Suiza de Cooperación al Desarrollo (SWISSAID), conforman la Alianza Guardianas de los Páramos y seleccionan 37 organizaciones de base comunitaria para ejecutar sus iniciativas
territoriales.
Contribuir a la conservación, restauración y uso sostenible de la biodiversidad y disminuir la vulnerabilidad de los ecosistemas y familias ante los efectos del cambio climático, fortaleciendo las capacidades comunitarias para la gestión del territorio y fomentando la participación y liderazgo de las mujeres.
Producción agroecológica adaptada al clima, que incluyó la transición a prácticas sostenibles con un enfoque territorial.
Conservación y restauración de ecosistemas por medio de acciones comunitarias que aportaron a la protección de fuentes hídricas, la propagación de especies nativas y la siembra de árboles en áreas estratégicas.
Emprendimientos sostenibles comunitarios que promovieron y rescataron otras actividades económicas, así como aportaron a la recuperación y conservación de los ecosistemas y el bienestar de las familias.
Desarrollo de la Escuela de Liderazgo y Empoderamiento Femenino, a través de 12 encuentros en los que participaron 30 mujeres, que posteriormente hicieron réplicas con otras mujeres de sus comunidades
Fortalecimiento de capacidades organizativas que aportaron a la formación de nuevos liderazgos, de sabedores locales que dejan capacidad instalada y el manejo financiero y administrativo de proyectos.
Las 37 iniciativas se convirtieron en un referente comunitario y territorial con experiencias de reconversión productiva hacia prácticas de bajo impacto en áreas de bosque y páramo, y evidenciaron nuevas oportunidades para continuar apoyando iniciativas que apuestan por un territorio sostenible y resiliente, beneficiando el bienestar humano, la conservación de los ecosistemas estratégicos y las herramientas para afrontar retos socioambientales de forma integral. Se destaca el liderazgo y trabajo de las mujeres en los diferentes ejes, lo que evidencia el empoderamiento personal y organizativo de las mujeres participantes, y su mayor capacidad e interés por incidir en la gestión territorial.