Nace Huellas verdes – Viveros para la vida, una solución local para restaurar y conservar el agua en Nariño

Enero 12, 2020

Asociación ecológica de Producción de Frutos Andinos

En las últimas dos décadas, el recurso hídrico en el departamento de Nariño se ha visto gravemente afectado por la deforestación para la siembra de cultivos y la ganadería extensiva. Para recuperar los bosques perdidos, diferentes entidades, entre ellas el PPD y la Gobernación de Nariño, han estado apoyando ampliamente procesos de restauración en la zona. 

“En el 2010 tuvimos un verano de seis meses muy duro. En ese entonces la microcuenca Zaragoza pasó de 45 litros por segundo a 11. Los campesinos nos preocupamos y dejamos de talar. Ahora lo que estamos haciendo es tratar de recuperar.” Afirmó Rigoberto Diaz, socio de la Asociación Agropecuaria Galeras (Asaaga).

Grupo para la producción apícola

Según él, el error más grande que se cometió en su territorio fue permitir que el Inderena talara el bosque nativo para sembrar especies introducidas como el pino, el eucalipto y el urapá, con su proyecto “Maderas del futuro”.

“Antes usted venía a la zona nuestra y miraba cascadas de 30, 40 y 50 metros y ahorita usted ya no mira cascadas sino una caidita de agua muy pequeñita”. Dijo Rigoberto, quien ha vivido en el territorio por más de cincuenta años.

El problema con los árboles introducidos, según Luz Mery Perdomo, representante legal de Asogaleras, es que aunque capturan mucho carbono por su grosor, no son las mejores especies para la restauración de microcuencas porque retienen mucho el agua.

Por esto, y en vista de que las corporaciones no suelen tener especies de árboles nativos para la venta, nace Huellas Verdes – Viveros para la vida, una red de viveros de campesinos e indígenas, que pretende suplir la demanda de árboles, con especies nativas de la región. 

Nuestra expectativa es que nos conozcan a nivel nacional e internacional. Nosotros incluso decimos, poder vender a otros países! No solo los árboles, sino también nuestro conocimiento! No somos profesionales, somos campesinos pero nuestra experiencia ha hecho que nosotros podamos propagar incluso especies que a profesionales de parques les ha quedado difícil. Afirmó Luz Mery, con fervor.

Grupo para la producción apícola

Asaaga, la asociación a la que pertenece, comenzó el proceso de rescatar árboles nativos y en vía de extinción, en los municipios de Yacuanquer y Consacá, hace ya más de quince años. 

“Lo que hicimos fue recopilar experiencias de la gente mayor que conocía unas especies que ya no existían en nuestra región, nos enseñaron conocimientos ancestrales que nosotros no sabíamos y en el camino nos fue posible capacitarnos con personajes del Humboldt, que nos extendieron el conocimiento en fauna y flora”. Afirmó Marino Delgado, representante legal de la red de viveros y socio de Asaaga.

Grupo para la producción apícola

Desde el año 2018 el Programa de Pequeñas Donaciones del GEF, implementado por el PNUD, en alianza con la Gobernación de Nariño, llevó a cabo la convocatoria “SurSostenible” para trabajar de la mano de 59 organizaciones de la sociedad civil en la conservación y uso sostenible de la biodiversidad, en el departamento. 

Fortalecer la gobernanza local y el manejo del agua fue una de las líneas estratégicas que apoyó esta alianza y Asaaga hizo parte de este proceso como formador. Como resultado, 40 organizaciones restauraron 290 hectáreas, implementaron 28 viveros temporales y 24 viveros permanentes con 210.200 plántulas.

Huellas Verdes – Viveros para la vida es el resultado del trabajo de las 40 organizaciones comunitarias que en la primera fase de esta convocatoria fortalecieron sus capacidades en técnicas de restauración y viverismo, y al mismo tiempo se dieron a la tarea de recuperar árboles nativos que estaban en vía de extinción. 

Grupo para la producción apícola

En la segunda fase, el Programa busca es fortalecer a las cuatro organizaciones con los viveros más grandes para que estas a su vez fortalezcan a las otras organizaciones con viveros más pequeños.   

“La idea es involucrar a todas las veredas que estuvieron en SurSostenible y sacarlas adelante con la producción y venta de árboles nativos de nuestra zona”. Dijo Rigoberto.

Las cinco organizaciones son Pumamaki (Guachucal, RI Muellamues), Sinchimaki (Cumbal), Coodmilla (La Llanada) y  Acualoma (Sandoná). A este proceso se suma la Asociación Agropecuaria y Ambiental Galeras (Yacuanquer-Consacá) como formador de formadores.

“Lo que estamos haciendo es proteger el recurso hídrico. Usted sabe que el agua genera todo, genera vida, genera alimento, genera progreso. ¡Eso es lo que nosotros nos metimos en la cabeza, qué si nosotros cuidamos el agua vamos a tener progreso en nuestras comunidades!”.

Afirmó Rigoberto, orgulloso del trabajo de su asociación y entusiasmado con lo que la red de viveros va a significar para la restauración y conservación del agua, en el departamento nariñense.  

El Programa de Pequeñas Donaciones (PPD) del GEF en Colombia, implementado por el PNUD, tiene como objetivo fortalecer la gestión ambiental comunitaria, mediante la financiación de proyectos que contribuyan a la conservación de la biodiversidad, el fortalecimiento de las capacidades locales y el mejoramiento de los modos de vida de la población local.

El PPD funciona a través de un modelo de convocatorias que se desarrollan principalmente en paisajes geográficos y líneas estratégicas priorizadas. Una de ellas, es la línea de restauración y protección del agua. En Nariño, donde se han desarrollado la mayoría de los proyectos sobre este tema, a través de la convocatoria SurSostenible, se restauraron 290 hectáreas en microcuencas abastecedoras de 43 acueductos veredales que proveen de agua a más de 19.000 familias.